Este es un vestido muy básico pero que queda
sorprendentemente bien, aunque el maniquí, el pobre, lo luce con toda su gracia…
Al ir fruncido en el centro marca la cadera, y la goma de la
cintura ajusta el vestido para que le dé forma a la silueta.
Le hice por debajo una especie de camiseta negra para que no hubiese problemas a la hora de sujetarlo y, a la vez, no perder el escote de la espalda.
No hay comentarios:
Publicar un comentario